El miércoles al mediodía estudiantes secundarios del colegio DA
VINCI de Berazategui realizaron un abrazo simbólico a su barrio, rodeando los
pozos que han realizado en la esquina de su escuela para enterrar el cableado
de media tensión que sale de la Subestación RIGOLLEAU.
El Da Vinci quedó encerrado entre la calle 21 y 145 con
tendidos de alta tensión, la subestación RIGOLLEAU que transforma 132.000
voltios de energía, y las salidas de media tensión de las calles 145 y 18.
“No queremos estudiar adentro de un microondas” decían
algunos de los cartelitos que los chicos hicieron en sus hojas de carpetas.
La contaminación electromagnética genera enfermedades
letales en los seres humanos, entre ellas y reconocida por la OMS está la
leucemia en niños.
En Berazategui no se cumple ni la Convención
Internacional de los Derechos del Niño, ni las leyes nacionales y provinciales
de derechos de niñez y adolescencia. LAS AUTORIDADES MUNICIPALES no dan
explicación alguna sobre esta obra, sus irregularidades y la amenaza contra la
población.
EL ENRE (Autoridad Nacional) no controló la obra ni
atendió las denuncias de irregularidades que los vecinos han realizado en las
oficinas del ENTE y ante la justicia.
Pero tanto el ENRE como el MUNICIPIO se encargaron de
enviar cientos de efectivos policiales para que “cuiden” la obra, quienes
intimidatoriamente ocupan el barrio desde el 13 de febrero, cuando la empresa
EDESUR retomo la construcción y puesta en macha de la Subestación RIGOLLEAU. La
policía corta calles, pide documentos a la gente que camina por SU BARRIO y
cobra horas extras, al servicio de una empresa multinacional.
Los chicos están reclamando por su DERECHO
intransferible a la VIDA. Están
reclamando que esta obra se traslade a zonas no pobladas donde no comprometa la
vida de la gente.
Las autoridades le responden con silencio y ocupamiento
policial.
Falta democracia en Berazategui!!
TRASLADO YA DE LA SUBESTACION A ZONAS NO POBLADAS!!!
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